En las barrancas del Paraná en Rosario, se izó por primera vez la bandera nacional conforme a los colores de la escarapela, es así que el General Manuel Belgrano enarboló por primera vez la enseña patria en lo que en ese entonces era Villa del Rosario, en lo que hoy es la ciudad de Rosario, en la Provincia de Santa Fe.
Fue entre las baterías Libertad e Independencia que hacia apenas pasadas las 18:30 horas Belgrano tomó juramento a los soldados:
Juramento a la Bandera: ¡Soldados de la Patria!! En este punto hemos tenido la gloria de vestir la escarapela nacional que ha designado nuestro Excelentísimo Gobierno: en aquel, la batería de la Independencia, nuestras armas aumentarán las suyas, juremos vencer a nuestros enemigos, interiores y exteriores, y la América del Sur será el templo de la Independencia y de la Libertad. En fe de que así lo juráis, decid conmigo” ¡Viva la Patria!!
Es ese mismo día que el Triunvirato decide hacer cargo a Belgrano del Ejército del Norte, al mismo tiempo que el General avisaba al Gobierno el hecho de jurar los colores celeste y blanco que había llevado a cabo con los que ahora eran sus tropas a cargo. Aparentemente la bandera en un principio sería de dos franjas, una blanca superior y otra debajo de color celeste, similar a la que usaría el General San Martín con su ejército.
Otro detalle a destacar es que Rivadavia ordenó no utilizar esta nueva creación, para continuar con la bandera española como identificación, pero el General Belgrano no acusaría recibo de esta esquela hasta mediados de año, donde por esas alturas hasta el mismísimo Triunvirato lo había intimado a lo cual Belgrano responde afirmativamente, pero con mucho dolor que acataría la orden, más al otro año se comentaría a utilizar las 3 franjas celeste, blanca y celeste, siendo esto atribuído a los colores de la Casa de Borbón, que con Fernando VII de Borbón encabezaban la Corona Española por ese entonces.